El 23 de octubre en Panta, por suerte, gente de San José
recordó esta gesta del Pueblo Oriental, orgullo de rebeldía en defensa de sus
derechos soberanos.
Gesta de Artigas, admirada por su defensa de los
desposeídos y sus indeclinables principios federales contra el colonialismo
español.
Lamentablemente, ha sido un icono devaluado por la
realidad, primero con la entrega de los recursos de la Banda Oriental bajo el
formato de un país a medida de los ingleses y después a la política nativa, con
los gobiernos de la patria ganadera y más recientemente por la patria
financiero consumista.
Volviendo a Panta, considero que es oportuno anotar el
sistemático olvido del hecho en que ha caído el Departamento. Como evento
aislado, recordamos un corto simulacro desde el Paso de los Carros, sitio donde
debe haber ocurrido una significativa concentración.
Lo mínimo sería bautizar como tal la Ruta del Éxodo, en
un entorno de destaque histórico y paisajístico, con los paisajes ya
reconocidos en 1811, como los pasos del Jesús María, Sauce, Coronilla y Mahoma
entre las asperezas rocosas y el Río San José, para después trepar la Cuchilla
Guaycurú, hasta Arroyo Grande.
Sin grandes costos, al menos plasmar la ruta en un mapa digital,
ilustrado, para el que desee realizar este recorrido turístico cultural, real o
virtualmente. Además, mantener dignamente los espacios urbanos que lo recuerdan.
Valga también un recordatorio para el actual drama de los
desplazados, principales víctimas del colonialismo, a lo largo de todo el
planeta.
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